A raíz del caso de una paciente de Camerún, diagnosticada con una nueva cepa del VIH muy similar al virus de la inmunodeficiencia simia (VIS) que se ha detectado recientemente en los gorilas, unos investigadores franceses escriben un comunicado en la revista ‘Nature Medicine’ en el que se replantean el papel de estos simios, y de los chimpancés, como focos de infección.
Jean-Christophe Plantier, principal autor del estudio, fue el que identificó en 2004 que una mujer de 62 años, procedente de Camerún y que se había trasladado recientemente a París, era seropositiva. Tras realizar distintos análisis del virus, los expertos, procedentes entre otros de la Universidad de Rouen (Francia), vieron que se trataba de una nueva variante del VIH.
A las tres caras que este virus ofrece en los humanos (denominadas M, N y O), todas relacionadas con el virus simio (VIS), se suma ahora una cuarta, bautizada como P. Aunque presenta similitudes con la cepa O humana, parece más parecida a la de los gorilas, identificada recientemente en las heces de estos animales halladas en los bosques de Camerún.
En unas declaraciones recogidas por ‘NewScientist’, David Robertson, que se encargó de analizar el ADN del virus desde la Universidad de Manchester (Reino Unido), sugiere que “algunos de los virus tipo O podrían provenir de estos simios”. Pero, añade, también existe la posibilidad de que “se originarán en los chimpancés y de ahí se transmitieran, de forma independiente, a los gorilas y a los humanos”.
“Sería toda una sorpresa si no se dieran más casos en humanos”, ha expresado Robertson. No obstante, ha aclarado que, por el momento, no se plantea la posibilidad de que el virus se haya transmitido directamente de gorila a humano. De hecho, la mujer infectada no parece haber tenido ningún contacto directo con estos animales.
El estado de la paciente
La mujer cuenta con una alta carga viral (cantidad del virus circulando en sangre) pero se encuentra en buen estado ya que, por el momento, no parece haber desarrollado la enfermedad y su sistema inmunológico está estable. Los expertos esperan que este virus pueda ser tratado con los antivirales que se emplean hasta ahora.
Por último, Robertson añade que es muy posible que ya existan más casos de este tipo pero que no se estén identificando adecuadamente. “Somos muy buenos detectando el VIH pero, a nos ser que realicemos este tipo de tests más profundos, no tenemos por qué encontrar estos virus divergentes”.
“Nuestros hallazgos indican que los gorilas, además de los chimpancés, son fuentes del VIH-1. El descubrimiento de esta nueva clase de VIH-1 subraya la necesidad de vigilar de cerca la emergencia de nuevas variantes del virus, particularmente en África central y occidental, que es donde se han originado todos los grupos existentes de VIH-1”, concluye el documento.
http://www.elmundo.es/elmundosalud/2009/08/03/hepatitissida/1249300373.html