Contar con una vacuna eficaz contra los cuatro serotipos de Dengue que azotan amplias áreas, renovadas y crecientes de los países intertropicales, será uno de los más significativos logros en la lucha contra las enfermedades olvidadas. Al mismo tiempo, una vacuna eficaz y segura tendrá una significativa rentabilidad económica, ya que cerca de 2.500 millones de personas bajo riesgo son, a pesar de todo, un gran mercado potencial.Se está desatando una carrera entre las industrias farmacéuticas Sanofi-Aventis (francesa) que ensaya una vacuna viva atenuada y Glaxo SmithKline ( inglesa) que desarrollará una patente del Ejército de los EEUU sobre una vacuna inactivada.
El dengue, transmitido por los mosquitos y que infecta a decenas de miles de personas en el mundo cada año, ha confundido por años a los científicos que buscan un vacuna para prevenir la enfermedad.
Entre los desafíos que enfrentan está el hecho que el efecto del virus en los animales no se asemeja al efecto en la gente, lo que hace que sea muy difícil realizar estudios en animales que pronostiquen cómo funcionaría en los huma-nos. Además existen cuatro serotipos del virus dengue, lo que requiere una va-cuna más compleja que si hubiera sólo
Ahora, sin embargo, los investigadores creen que están más cerca que nunca de encontrar una vacuna efectiva. La iniciativa ha sido dirigida no sólo por los fabricantes de vacunas como Sanofi-Aventis y GlaxoSmithKline, sino también por el Ejército de Estados Unidos y otras organizaciones gubernamentales sin ánimo de lucro. No obstante, no hay garantía de que cualquiera de las vacunas en desarrollo llegará al mercado.
“Hay algunos ejemplos prometedores entre las vacunas candidatas”, dijo Anthony Fauci, el director del Instituto Nacional de Enfermedades Alérgicas e Infecciosas, en una conferencia de prensa el jueves pasado
La Organización Mundial de la Salud estima que unos 2.500 millones de personas corren riesgo de contraer dengue, con unos 50 millones de infecciones a nivel mundial cada año. Buena parte de los casos recaen en los climas tropicales y subtropicales en las regiones de Asia Pacífico y América Latina.
La farmacéutica francesa Sanofi parece tener el programa más avanzado de vacuna para el dengue, al haber comenzado la última fase del estudio en seres humanos de una vacuna experimental el año pasado. Si las pruebas salen bien, Sanofi podría introducir una vacuna en 2016.
La vacuna experimental de Sanofi es un compuesto genéticamente manipulado de variedades vivas del virus y elementos de una vacuna de la fiebre amarilla, pero debilitados para que no provoquen la infección en las personas. Las pruebas de laboratorio y en animales han sugerido que pueden inducir una respuesta inmune, y los primeros ensayos en humanos han mostrado ser relativamente seguros, con efectos secundarios mayormente suaves y moderados.
Sanofi inició una prueba de su vacuna para el dengue el año pasado en Australia, y también la está probando en unos 4.000 niños en Tailandia y anticipa obtener resultados a finales de 2012, afirma Jean Lang, vicepresidente asociado en el programa de investigación de nuevas vacunas para epidemias.
Aún es demasiado pronto para decir cuanto costarán estas vacunas si llegan al mercado, pero Sanofi ofrecería distintos niveles de precios para que sean más baratas en los países más pobres que en los desarrollados, asegura Lang.
La farmacéutica estima que el potencial de mercado para la vacuna del dengue superaría 1.000 millones de euros en ingresos anuales, sostuvo su portavoz Pascal Barollier.
El Ejército de Estados Unidos ha buscado una vacuna para proteger a sus soldados desplegados en las regiones donde el dengue es un riesgo, dice Paul Mele, el director de la Oficina de Investigaciones y Aplicaciones Tecnológicas del Comando de material e investigación médica del ejército en Fort Detrick, Maryland. Además, de vez en cuando la enfermedad aparece en Estados Unidos incluyendo casos en los cayos de Florida en 2009 y el año pasado.
A principios de este mes, el ejército emitió una declaración de intención para garantizar una licencia de patente exclusiva a la farmacéutica británica GlaxoSmithKline para desarrollar en profundidad una vacuna experimental del dengue descubierta por los investigadores del ejército. Los detalles financieros del acuerdo no fueron publicados.
La vacuna del ejército aún no ha sido probada en humanos, y se diferencia de la de Sanofi en que está “inactivado”, lo que significa que no contiene un virus vivo. “sentimos que esta, al menos potencialmente, es una más simple y fácil de desarrollar en un producto”, explicó Mele.
Glaxo también ha estudiado una vacuna con el virus vivo pero atenuado que está en mitad de la fase de pruebas en humanos, dijo un portavoz de la empresa.
Fuente: – The Wall Street Journal (Estados Unidos)
23 de febrero de 2011