Las estimaciones se basan en la Primera guía mundial sobre la quimioprevención de la malaria estacional, publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en marzo. La guía ofrece un amplio título de autorización a los gobiernos y los donantes que tratan de establecer medicación antipalúdica profiláctica en los niños africanos, sopesando como dice Brian Greenwood, médico especialista en enfermedades infecciosas de la London School of Hygiene and Tropical Medicine, si es ésta, publicada hoy por Nature, la estrategia mas provechosa.
Como afirma Rob Newman, director del Programa OMS Global para Malaria en Ginebra, bien está lograr todo de un golpe, como sucede con las telas mosquiteras, pero dada la complejidad del problema también son necesarios otros procedimientos.
“Los investigadores creen que en algunas partes de Senegal, Burkina Faso, Malí y Níger se dan condiciones prometedores para la quimioprevención estacional en función de tres factores: la carga parasitaria, predicción de paludismo estacional y la eficacia de la combinación de los fármacos sulfadoxina-pirimetamina + amodiaquina ( SP-AQ).
En algunos países africanos, la gente ya no responde a la SP-AQ, porque la combinación sulfadoxina y pirimetamina se utilizó para tratar la enfermedad antes de que la utilización de artemisinina se convirtiera en el estándar de oro del tratamiento.
La resistencia es siempre un peligro cuando los medicamentos se toman como profilácticos, por lo que la OMS indica que las personas sometidas a esta profilaxis, si se infectan deberán ser tratadas con otros antipalúdicos diferentes. La aplicación de SP-AQ a razón de un máximo de cuatro tratamientos mensuales, durante la estación, por un importe de 1,50 $ USA costaría menos que las pastillas de Malarone o mefloquina que los turistas toman cuando van a África.
A este bajo precio, dice Greenwood, el análisis costo-beneficio sugiere que el empleo de SP-AQ merecería la pena aunque sólo fuera eficaz evitando la malaria en uno de cada cinco niños.Las zonas con lluvias estacionales son los más adecuados para la quimioprevención de la malaria estacional.
Una de las más grande entre las organizaciones mundiales de control de la malaria -, la Iniciativa del Presidente contra la Malaria en Washington DC, puede ayudar a los países cuidadosamente seleccionados para implementar la estrategia, dice Bernard Nahlen, coordinador adjunto de la iniciativa. Les facilitará los medicamentos, dice Nahlen, pero los países tendrán que pagar a los trabajadores de salud que los apliquen, y vigilar los efectos adversos.
En la década de 1980, dice, SP causó reacciones cutáneas semejantes a quemaduras en una pequeña proporción de occidentales, razón ente otras por la que ya no se recomienda para los turistas hoy en día. Por ello, la toxicidad es una de las razones contra el uso profiláctico dado que, argumentan, los niños africanos nunca han recibido un medicamento para prevenir la enfermedad potencialmente letal, lo que no parece demasiado justificado dado que los turistas han utilizado este tratamientos preventivos desde 1960 sin mayores consecuencias.
Otro argumento se basa en la idea de que los africanos serán más vulnerables a la malaria grave cuando lleguen a adultos, ya que no adquirieron – por causa de la profilaxis – un grado de inmunidad contra la enfermedad en la juventud.
Sin embargo, dice Greenwood, que poca evidencia apoya la hipótesis de que las personas que no reciben la malaria de niños les irá peor si se infectan de adultos que los que también se infectaron de niños.
Los críticos también argumentan que la quimioprevención en África es logística y financieramente inviable debido a las condiciones económico-sociales reinantes.
El debate sobre la quimioprevención (como única medida ) llegó a su fin cuando entró en escena un método más simple de prevención de la malaria, los mosquiteros. “Una vez que los mosquiteros entraron en escena, todo el mundo, incluyéndome a mí, le quitaron los ojos a la quimioprofilaxis. Los moisquiteros son muy eficaz para la prevención y más fáciles de introducir . “Ahora que están ampliamente distribuidos, está claro que son un gran éxito, pero no del todo.” En los sitios de prueba en Burkina Faso, dice, los mosquiteros han reducido a la mitad el número de casos de malaria, y hasta el 80% la quimioprevención estacional.
La quimioprofilaxis estacional no es eficaz en otros países con alta mortalidad, tales como la República Democrática del Congo y Uganda dado que la malaria no es estacional sino continua y no hay respuesta terapéutica a la combinación SP-AQ. La estrategia de quimioprofilaxis funciona donde las condiciones son adecuadas, es una fruta madura. Pero ¿ qué hacer en los lugares donde no se puede implantar?. Philip Rosenthal, un investigador en malaria de la Universidad de California, en San Francisco, está de acuerdo con los razonamientos anteriores, pero al tiempo dice que hay que explorar otras posibilidades, por ejemplo, el uso de Malarone. Es verdad que es caro, pero también es cierto, que en los países desarrollados se gastan millones en la terapia preventiva infantil antirretroviral para tratar VIH y con medicamentos más caros.
Fuente: Noticias Nature¸Amy Maxmen, 06 June 2012¸Nature doi:10.1038/nature.2012.1078