Jornada Científica sobre “Innovación e inteligencia artificial en salud”
El pasado jueves 10 de septiembre se celebró, en la Real Academia Nacional de Farmacia, una jornada científica RANF/Areces sobre ‘Innovación e inteligencia artificial en salud’. Tras unas palabras introductorias a cargo de los Excmos. Sres. D. Antonio L. Doadrio Villarejo (RANF) y D. José María Medina Jiménez (RANF/Areces), el Ilmo Sr. Honorio Carlos Bando Casado, presentó la jornada. Intervinieron como ponentes la Ilma. Sra. Dª. María Isabel Moya García y los Ilmos. Srs. D. Víctor Jiménez Cid y D. Francisco Zaragozá García.
La doctora Moya García señaló la importancia de la innovación en Medicina, vinculada al desarrollo científico y tecnológico, en la que se incluyen las políticas, prácticas, sistemas, productos y tecnologías, servicios y métodos de prestación de los servicios de salud que redunden en la mejora de la atención sanitaria. Esta necesidad de innovación viene demandada por una crisis, marcada por los actos costes, personales y económicos, de la actual estructura sanitaria, los cambios demográficos y la variabilidad clínica de la población. Como una posible vía de superación de la situación actual, la OMS planteó para 2025 el desarrollo de una ‘salud digital’, entendiendo por tal el uso de las tecnologías de la información y comunicación para mejorar la salud, el bienestar y la atención sanitaria, lo que supone no solo un cambio en la organización, los procesos y la tecnología, también en la mentalidad de las personas. En este cambio de paradigma resulta básico el empleo de la inteligencia artificial, tanto para la predicción de resultados basados en datos históricos (inteligencia discriminativa), como en la génesis de nuevos resultados a partir de datos previos (inteligencia generativa). Para ejemplarizar los aspectos señalados, señaló la utilidad de la inteligencia artificial en el diagnóstico médico mediante imagen; con ello puso de manifiesto la importancia de disponer de grandes volúmenes de datos interoperables, bien estructurados y de calidad, para que la capacidad predictiva de la inteligencia artificial sea lo más aproximada posible a la realidad. Sus últimas palabras estuvieron dedicadas a la necesidad de definir un adecuado marco legislativo y deontológico para el desarrollo de estas técnicas innovadoras.
El doctor Jiménez Cid centró su atención en las aplicaciones de la inteligencia artificial a la gestión de la atención sanitaria y al uso del medicamento, en particular como elemento capaz de agilizar la realización de tareas repetitivas, gestión de datos y análisis de rutinas en los sistemas de salud. En lo que atañe al sector farmacéutico, presentó unas líneas generales de cómo afecta la inteligencia artificial desde la investigación a la producción, distribución y comercialización de medicamentos, para ocuparse de una de estas facetas: el descubrimiento y desarrollo de nuevos fármacos, en particular de la modelización de dianas terapéuticas mediante el empleo de AlphaFold DB, una base de datos que proporciona acceso a más de 200 millones de predicciones de estructura tridimensional de una proteína a partir de su secuencia de aminoácidos; presentó, también, algunas experiencias sobre la explotación del microbioma intestinal humano, mediante inteligencia artificial, para desarrollar péptidos antibióticos. Como colofón abordó los retos con que la inteligencia artificial se encuentra en el ámbito farmacéutico: cohortes de datos muy limitadas, como en el caso de las enfermedades raras; sesgos en los datos, bien por errores humanos bien por falta de trasparencia; carencia de modelos de estandarización de datos, con datos muy complejos en formatos diversos; complejidad en los procesos de categorización de datos y ausencia de un marco regulatorio preciso para el empleo de las tecnologías vinculadas a la inteligencia artificial.
El doctor Zaragozá inició su intervención señalando la conveniencia -e incluso la necesidad- del empleo de la inteligencia artificial en el ámbito sanitario, señalando entre sus ventajas la aceleración de los tiempos, la precisión, el incremento de eficacia en la investigación y en los ensayos clínicas, además de obtener resultados difícilmente previsibles. Ejemplarizó algunos resultados obtenidos mediante el empleo de estas nuevas técnicas y presentó una valoración del empleo de las terapias CAR-T y su conexión con la inteligencia artificial.
Al finalizar sus exposiciones, los conferenciantes mantuvieron un fructífero diálogo con los académicos presentes en la sala.
