El Dr. Bautista dedicó si intervención a las “Esperanzas y desesperanzas de las vacunas frente a la malaria”; tras mostrar unos datos sobre la evolución mundial de la malaria desde 1900 hasta el momento actual y recordar el ciclo del parásito causante de la enfermedad, abordó la situación de la malaria, detallando la estratificación de los distintos tipos de la enfermedad en regiones endémicas, tanto por criterios geográficos como por edad. Se ocupó, a continuación, del diagnóstico de la malaria en regiones endémicas, insistiendo en que las infecciones asintomáticas son, en la mayoría de los casos, submicroscópicas y solo detectables por PCR, lo que le llevó a preguntarse si estas personas asintomáticas están efectivamente protegidas y en qué consiste, realmente, la protección frente a la malaria. Para conocer cual es el estado real del estado de protección de las poblaciones frente a la malaria en zonas endémicas, presentó un estudio empleando inmunoglobulina M específica de Plamodium falciparum en una región de Ghana, donde se pone de manifiesto la mayor presencia de esta inmunoglobulina en los casos de infecciones asintomáticas, incluso aún mayor que en los de infección microscópica. Por ello planteó la tipificación de tres tipos de vacunas: bloqueantes de la transmisión, pre-eritrocíticas (pre-enfermedad) y eritrocíticas (anti-enfemedad), en función del estadío sexual del mosquito transmisor, y presentó un esquema con las distintas vacunas, en función de esta tipificación, que están ensayándose actualmente. Centró su intervención en las vacunas RTS,S (1995), NEIM (2012), NEIM (2019), R21 (2017) y R21/MATRIX 2022. Como conclusiones señaló que la protección a largo plazo de la vacuna no es completa ni esterilizante y depende de la situación epidemiológica en cada región, su eficacia aumenta en presencia de medidas profilácticas adicionales (insecticidas, mosquiteras), el reservorio silente de la malaria en zonas endémicas es muy elevado, el adyuvante es un elemento esencial en la composición vacunal y resaltó el que deben explorarse diferentes tipos de vacunas (bloqueantes de la transmisión, pre-eritrocíticas y eritrocíticas), que podrían ser complementarias y proteger frente a los distintos tipos de enfermedad.
El Dr. Larraga se ocupó de “La nueva vacuna de ADN frente a la leishmaniosis canina”; tras presentar los primeros casos de la enfermedad, descritos en nuestro país por los doctores Pittaluga y Fernández Martín en los primeros años de la década de 1910, señaló el agente etiológico, el reservorio, las áreas endémicas y los síntomas de la enfermedad, para pasar a ocuparse de los distintos tipos de agentes causantes y de la incidencia geográfica de la enfermedad en el área mediterránea, en general, y en España, en particular. Comentó el ciclo del parásito causante de la enfermedad y señaló los nuevos avances en vacunas con ácidos nucleicos que han permitido acabar con algunos tabús generalizados sobre las dificultades de su empleo. Abordó el mecanismo de activación del sistema inmune, centrándose en los casos de parásitos intracelulares, y presentó una estructura genérica de un plásmido vacunal de ADN; entre las vías de inducción de la respuesta inmune, analizó el potencial de la vía intranasal. Comentó los trabajos de su equipo sobre la vacuna intranasal pPAL-LAck contra la leishmaniosis, para concluir que protege totalmente frente a los signos clínicos, al menos en un 60% de los animales y disminuye su gravedad en el resto; reduce la carga parasitaria en un 92% e induce una actividad protectora de las células TH1 del sistema inmune, razones por las cuales ha sido aprobada por la Agencia Europea del Medicamento en noviembre de 2022 y ha sido considerada como uno de los medicamentos innovadores de ese año.
Tras las ponencias se abrió un interesante coloquio en el que participaron un buen número de los miembros de la RANF presentes en la sala.